Tradiciones
Los Peregrinos de Useras
La Peregrinación de Les Useres a San Juan de Peñagolosa fue declarada Bien de Interés Cultural Inmaterial el dia 29 de abril de 2016, Decreto 53/2016 publicado en el DOCV el 3 de mayo de 2016. También cuenta con la distinción de la Generalitat Valenciana al Mérito Cultural, por Decreto 206/2004, publicado en el DOCV de 8 de octubre de 2004. Además el camino está declarado Monumento Natural del Camí dels Pelegrins, espacio protegido por la Generalitat desde el año 2007 (más información en la sección de Parajes Naturales).
El último viernes de Abril el pueblo de Les Useres, en la Comarca de l’Alcalatén, rememora una antigua tradición que nos sumerge de lleno en la Edad Media. Son trece hombres, el guía y doce peregrinos (en representación de Jesucristo y los doce Apóstoles), acompañados por tres cantores, el cura, el representante del Ayuntamiento, los clavarios, el depositario, las promesas y el grupo de las càrregues, los que renovarán un año más el voto de todo el pueblo al marchar en peregrinación penitencial hacia el santuario de San Juan de Peñagolosa.
No se sabe mucho de sus orígenes: pestes, tiempos de sequías, guerras, etc., cualquier motivo era suficiente para manifestar la fe en Dios, la Virgen y los Santos. Según el canto del O Vere Deus se pide por la salud, la paz y la lluvia.
Los Peregrinos son personas voluntarias elegidas siguiendo el turno de las calles que recorre las cinco barriadas en las que se divide el pueblo (Barrios de la Virgen del Loreto, de Santa Ubaldesca, de la Virgen del Carmen, del Cristo de la Agonía, y de Sant Roque). Los clavarios y las mujeres pastan las hogazas de San Juan en los diferentes hornos de la villa, los cocineros y el depositario preparan la comida, las vestas, cirios, utensilios y todo lo necesario para los dos días. El Ayuntamiento oficia a los otros pueblos, los términos municipales por los cuales pasarán los Peregrinos: Sant Miquel de les Torrocelles (Llucena), Chodos y San Juan de Peñagolosa (Vistabella).
Antes, hay tres días de preparación donde se ofician unas palabras de recuerdo sobre lo que tiene que ser el sentido cristiano de hacer una peregrinación. Es conocido con el nombre del Triduo, en que se realizan los rezos del Rosario, las Letanías, el Sermón, y el Canto de los Gozos.
El viernes de madrugada empieza el ritual con la misa de las càrregues, luego la de los Peregrinos, después se realiza la procesión de salida donde irán descalzos sobre un manto de hiedra, y con un sepulcral silencio solo roto por lo cantos gregorianos de los cantores que empapa el aire de las calles empinadas del pueblo. Ya en el Filador, se calzan y emprenden el camino de unos 35 kilómetros cada jornada, divididas en seis estaciones; donde los cantores no dejarán nunca de cantar los cantos propios de cada estación, y los otros rezarán las diversas partes del rosario.
El momento culminante de la peregrinación llegará el sábado por la mañana en el santuario de San Juan realizándose la ceremonia del Perdón, en la que el Guía en representación de Jesucristo les pedirá perdón y les besará los pies rememorando aquello que los antepasados transmitieron de padres a hijos a lo largo de los siglos. Según manda la tradición nada de lo que allí dentro ha pasado se tiene que decir, donde cada uno de los Peregrinos se quedará con la esencia de los actos y palabras que les transmitirá el Guía. Luego iniciarán el regreso hacia Les Useres, tras el paso por el pueblo de Chodos, llegando por la noche con la procesión de entrada al pueblo. Y una vez más se habrá cumplido la promesa de los antepasados, donde Les Useres quedará otra vez en el vaivén de la vida cotidiana, esperando ahora a la otra peregrinación hermana y menos conocida, la del Piló de la Creu, en memoria de la invención de la Santa Cruz del día 3 de mayo, con unos rituales semejantes a dicha peregrinación, y que ya aparecen documentados en el famoso Pleito contra la vila de Adzaneta del siglo XVII.
Procesión del Piló de la Creu
La Procesión del Piló de la Creu es menos conocida, pero conserva algunos elementos propios de la estructura general de la de los Peregrinos; ya que en ella también van en peregrinación el guía, los tres cantores, los clavarios, el cura, el representante del Ayuntamiento y el depositario, pero ahora sólo es permitido la participación en ella a mujeres, niños y niñas.
Todos juntos suben rezando hasta el Piló de la Creu, un punto geográfico en el cual se divisan los términos de Adzaneta y Les Useres, realizándose la bendición allí de los términos. Al bajar pasan por la Font del Mestre y por la Font de la Presola, en la cual meriendan los participantes y los acompañantes que quieran, habiendo repartido la tradicional fogasseta de la Creu, las orelletes con miel y la tortilla de miel.
Esta singular rogativa también arrastra muchos siglos, ya que en el pleito con Atzeneta (siglo XVII) se menciona su realización el día 3 de mayo, festividad de la Invención de la Santa Cruz, y hoy en día se ha recuperado tal y como antes, tras un parada de 30 años, la cual viene ahora celebrándose el fin de semana siguiente al de los Peregrinos.